Noticiero de la Sierra Norte de Puebla
Por Carlos Castelán
El simbolismo en la política es similar a como existe en las religiones; se encuentra velada por alegorías y esclarecida por símbolos. Sin duda, la visita de Marcelo Ebrard a Bolivia, en Sudamérica, es el símbolo del pensamiento modernista del Canciller que nos da a entender la distancia que toma del pensamiento oficial de Palacio con respecto al problema mundial del cambio climático y se prepara para las discusiones del T-MEC.
El tour oficial a Sudamérica comprendía una escala en Colombia para saludar y felicitar a Gustavo Petro Urrego quien recién tomó posesión como presidente de esa nación.
Allí, en Bogotá, el secretario Ebrard sostuvo una reunión de trabajo con empresarios mexicanos que tienen inversiones en Colombia, acordó impulsar mayor comercio e inversiones recíprocas entre ambos países, asimismo platicaron sobre las posibilidades de mayor cooperación en materia de desarrollo social, salud, integración regional, seguridad y energía.
Tema este último, que era el meollo del viaje del canciller Ebrard en su visita a Bolivia, hacia donde se dirigió posteriormente en un periplo de casi tres mil kilómetros para llegar al Salar de Uyuni, una ciudad en la cual el alcalde del Gobierno Autónomo Municipal, Eusebio López Martínez, entregó al secretario Ebrard la Declaratoria de Huésped Ilustre, así como las llaves de la ciudad, una muestra de los lazos de amistad y cooperación que une a pueblos hermanos.
Posteriormente y, acompañado de su homólogo boliviano, Rogelio Mayta, estuvieron en una visita al Salar de Uyuni, vasto desierto que cuenta con la mayor reserva de litio tipo salmuera en el mundo.
Y México, que no se queda atrás, cuenta con enormes reservas probadas de Litio. Hemos de recordar que en el mes de abril la investigadora Violeta Núñez Rodríguez dio a conocer el resultado de su investigación acerca del litio mexicano, en el cual detalló que en el país hay 82 localidades, repartidas en 18 estados donde existe evidencia geológica de presencia de litio
Por ello, el canciller mexicano en su discurso en ese inmenso desierto boliviano, afirmó que en México al igual que en Bolivia, principalmente en Uyuni, se cuenta con grandes reservas de litio, un mineral estratégico que será prioritario en el futuro de la electro-movilidad global.
Luego vimos a un largo Marcelo Ebrard subirse a un miniauto eléctrico movido por acumuladores eléctricos que funcionan con base en el Litio, componente esencial en la fabricación de chips y otros dispositivos para los equipos electrónicos actuales y del futuro, un material estratégico esencial.
Eso nos debe dar una idea que el camino que toma Marcelo Ebrard respecto a las ideas caducas y anticuadas que desde las mañaneras endilgan al país, hay una sana distancia que políticamente beneficia grandemente al canciller que cuenta con ideas modernas y futuristas sobre las energías limpias que deben prevalecer en México como firmante y comprometido en el combate al Cambio Climático que está terminando por afectarnos a todos y al futuro de la vida como la conocimos.
“Este encuentro y las conversaciones con funcionarios de ese país permitirá impulsar la cooperación entre ambos países en materia de Litio, y aprovechar la experiencia boliviana en el ciclo productivo, distribución y comercialización de este mineral estratégico, promoviendo el diálogo y cooperación regional con otros países con reservas”, señala en un comunicado la cancillería.
Ahora habrá que ver el papel que el Canciller MEC va a jugar en las pláticas sobre el Tratado de Libre Comercio; un (coincidencia de siglas) T-MEC que enfatiza el acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá que trata, de manera preponderante, el uso de las energías limpias en sustitución del uso de los combustibles fósiles que contribuyen al calentamiento global al descargar las emisiones de su combustión a la atmósfera si bien se puede reducir la contaminación del aire con varios tipos de limpiadores, catalizadores en las chimeneas y tubos de escape, estos dispositivos, medianamente ecológicos no reducen el CO2 que es el principal problema.
Sin duda, en Marcelo Ebrard prevalece, por su educación, conocimiento y experiencia, una visión de futuro que deberá ser la continuación en el porvenir energético de México, en consonancia con el mundo, pero enfatizando que esto sólo se puede ver -y dar- desde la punta de pirámide. Por lo que, estimado lector, al tiempo. Veremos y Diremos.
Periodista desde hace 40 años, ha laborado en todos los diarios de gran formato del Estado de Puebla con información, preferentemente de la Sierra Norte de Puebla.