Detención y extradición exprés a los EEUU de Ovidio Guzmán (a) “El Ratón”

PRISIÓN DEL ALTIPLANO, Edo. De México.- Gaceta de la Sierra Norte.- NSN.- Ovidio Guzmán López, hijo del célebre narcotraficante hoy radicado en la prisión federal de máxima seguridad ADX Florence en Colorado, la más segura de Estados Unidos y el mundo, fue sacado de manera expedita de la prisión del Altiplano (Almoloya) en un helicóptero miliar que lo trasladó hasta allá,  de manera directa y expedita.
De acuerdo con datos del Buró Federal de Prisiones de los EEUU, Ovidio Guzmán tiene 33 años, es el preso número 72884-748 y se encuentra en el Centro Correccional Metropolitano (MCC) ubicado en Chicago, en Illinois, sitio de máxima seguridad y en donde las celdas tienen ventanas de solo cinco pulgadas de ancho, diseño suficientemente estrechó para desalentar cualquier intento de fuga.
La extradición de Ovidio Guzmán, conocido en el bajo mundo con el alias de (a) «El Ratón», es la acción más importante entre el Gobierno del mexicano de Andrés Manuel López Obrador y la Administración de Joe Biden.
Pero ahora el preso número 72884-748 es Ovidio Guzmán, uno de los hijos de «El Chapo Guzmán», exlíder del Cartel de Sinaloa quien desde el año 2019 cumple cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad de Colorado (EE.UU.)
Fue a la desaparición de (a) “El Chapo” cuando Ovidio Guzmán López, (a) “El Ratón” se hizo cargo del cártel de Sinaloa, quien es uno de los cuatro hijos de (a) “El Chapo”, todos ellos conocidos con el alias de “Los Chapitos”, quienes se encuentran también en una acusación abierta en Chicago desde principios de este año.
De los hijos, Guzmán López, conocido como “El Ratón”, era el único bajo custodia y fue capturado en el Estado de Sinaloa, en enero pasado después de una intensa batalla que dejó 10 soldados y 19 sospechosos muertos, según informes de prensa.
Guzmán López, quien estaba detenido en México en espera de un proceso de extradición, fue trasladado vía aérea a Chicago al principio del fin de semana por la tarde y, de acuerdo con el portavoz de la oficina del fiscal federal en Chicago, Joseph Fitzpatrick, hoy lunes podría hacer una aparición inicial en el tribunal federal de Dirksen.
Guzmán López, estaba entre los 28 presuntos miembros del famoso cártel de Sinaloa acusados ​​como parte de una amplia investigación sobre tráfico de fentanilo revelada en abril por el fiscal general Merrick Garland, la jefa de la DEA Anne Milgram y otros importantes fiscales federales, incluido el fiscal federal en funciones de Chicago Pascual Morris.
Al darse a conocer los cargos, Garland describió la violencia del cartel de Sinaloa y cómo sus miembros han torturado a supuestos enemigos, incluidos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley mexicanos. En algunos casos, los miembros del cartel también han alimentado a los tigres, propiedad de los hijos de “El Chapo”, con sus víctimas algunas todavía vivas, dijo Garland.
La acusación de Chicago, que fue presentada bajo sello en el mes de enero pasado y en la cual se alega que Guzmán López asumió el control diario del cartel después del arresto de su padre en 2016 en un motel de la localidad de Los Mochis luego de haber escapado por una alcantarilla, de un tiroteo con elementos de la Marina en el cual murieron cinco «agresores». Hoy la acusación contra los hijos de “El Chapo” es por orquestar el envío de miles de libras de cocaína, marihuana, y otras drogas como fentanilo a los Estados Unidos por barco, avión y otros medios.
Los otros hijos de Guzmán acusados ​​en Chicago, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, Iván Archivaldo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López, siguen prófugos, pero ya los buscan.

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